Originarios de Antigua Guatemala, los hermanos Luis y José López son dos de los referentes de la esgrima guatemalteca, quienes sueñan con volver a compartir hazañas deportivas en eventos del Ciclo Olímpico; en abril próximo buscarán clasificar a sus primeros Juegos Panamericanos.
Inolvidable resultó su participación en los Juegos Centroamericanos en San José, Costa Rica en el 2013, donde ambos protagonizaron el combate por la disputa de la medalla de oro en la especialidad de florete.
“En esa final no sabía si llorar o reír”, recuerda Luis, de 20 años, quien se impuso en un dramático duelo frente su hermano.
“Competir con mi hermano siempre es emocionante y también es una oportunidad para apoyarnos en los triunfos y las derrotas”, expresa por su parte José, de 22.
Dejar su hogar en la adolescencia para dedicarse en cuerpo y alma al deporte, fue quizá el mayor sacrificio realizado por los hermanos López.
“Es difícil dejar el hogar, pero todo lo que hemos logrado ha valido la pena. Todos los triunfos son para Guatemala”, manifestó Luis.
“Nuestra motivación fue saber que en Sacatepéquez teníamos la posibilidad de practicar esgrima. Luego nos sacrificamos dejando nuestro hogar y luchamos por nuestros sueños”, rememora José en relación a su traslado al albergue de la Federación de Esgrima en la ciudad capital.
Para los hermanos López el gran objetivo del año será el de pelear por la clasificación a los Juegos Panamericanos, a realizarse entre el 10 y el 26 de julio en Toronto, Canadá.
“Sabemos que son pocos los esgrimistas guatemaltecos que han competido en Panamericanos. Daremos lo mejor, aunque sabemos que será un reto difícil”, finalizó Luis.
En la última edición, en Guadalajara 2011, el único atleta de esgrima fue Gerber Morales.
