El sueño de la selección de Suecia no terminó como todos pensaban en los octavos de final de Rusia 2018. Por primera vez desde 1994, Suecia se clasifica para los cuartos de final de una copa del mundo, tal y como lo hizo este martes al ganarle a Suiza con la mínima diferencia (1-0).
Suiza, por su parte, quedó eliminada por cuarta ocasión consecutiva cuando alcanzaron la fase decisiva. De la alegría sueca se pasó a la tristeza de los hombres dirigidos por Vladimir Petkovic.
«Fue una sensación surrealista pararse a un lado del campo y escuchar a los aficionados que gritaban mi nombre, pero el fútbol es un deporte de equipo y este equipo, para mí, personifica eso. Todos trabajamos muy duro el uno para el otro dentro y fuera del campo. Sabemos que somos un buen equipo y que nos hemos ganado nuestros éxitos”,
Janne Andersson, seleccionador de Suecia.
Mientras que Suecia ha sido elogiada durante la Copa del Mundo, hay un jugador que antes de este partido solo escuchaba críticas. Se trata de Emil Forsberg, quien ante Suiza consiguió ese gol con el que aleja a los fantasmas y acerca a los suyos a disputar la final.
Pero no todo es alegría, del lado de Suiza, el técnico Petkovic, consideró que en los últimos diez minutos su equipo jugó con más emoción y lograron ser mejores que sus rivales.
«Estamos muy decepcionados, claramente queríamos hacer más. Felicitamos al equipo sueco, ya que han hecho precisamente aquello en lo que son muy buenos, y ha sido suficiente para vencernos con un gol, son un hueso duro de roer”, puntualizó.
