El gol anulado a Marcelo Weigandt y la eliminación del cuadro argentino Boca Juniors de la Copa Libertadores ante el conjunto brasileño Atlético Mineiro por los octavos de final llevó a los jugadores Xeneizes a tener un capítulo violento, el cual terminó hasta la comisaría de Brasil.
Tras la eliminación, los jugadores de Boca Juniors se enfrentaron con algunos futbolistas del Atlético Mineiro, y en el cual, también se señala el lanzamiento de objetos por parte del presidente del club, de acuerdo a reportes de la prensa internacional.
Posteriormente, la agresión pasó contra los agentes de seguridad en uno de los pasillos que conducía a los jugadores de Boca Juniors a su camerino. Hubo hasta lanzamientos de vallas metálicas, entre otros tantos objetos. La policía reaccionó con lanzamiento de gas pimienta.
Tras los graves incidentes, la policía brasileña identificó a través de las cámaras de seguridad del Estadio Mineirão a varios jugadores, e integrantes de cuerpo técnico y dirigentes, por lo que fueron acusados de lesión corporal, agresión y destrucción de patrimonio público.
Ante ello, algunos fueron llevados a la Comisaría, pero por solidaridad, el resto del plantel los acompañó por lo que la delegación completa pasó la noche en la estación policial. Esa situación, generó un atraso en el regreso de Boca Juniors a Argentina.
Tanto Atlético Mineiro como Boca Junios buscan salir libres de los señalamiento, incluso, el cuadro Boquense pediría la expulsión de su rival del torneo más importante en Sudamérica.
