Un joven Elvin Haroldo López se inició en el tiro deportivo en su oriunda Chiquimula, sin saber que lo esperaría una vida llena de triunfos, logros y recompensas.
Su historia comenzó en tercero básico, donde una exhibición en su centro de estudios de parte de la Federación Nacional de Tiro, despertó su interés en el deporte, por lo cual decidió aceptar la invitación y formar parte de la especialidad de rifle de aire con blancos a diez metros.
En el año 2007, se integró de manera formal al equipo de Chiquimula, donde empezó a mejorar su técnica de disparo de la mano del entrenador Julio Cordero, con quien mejoró rápidamente y lo ayudó a conseguir dos medallas doradas por equipos y dos de plata a nivel individual en los Juegos Deportivos Nacionales en 2007. Luego de eso, Elvin se mudó a la Ciudad de Guatemala para seguir entrenando y formar parte de la Selección Nacional de Tiro Deportivo.
Con tan solo 17 años de edad, tuvo la dicha de representar al país frente a El Salvador. Para él fue todo un sueño y uno de sus recuerdos más gratos; ser juramentado como parte de una delegación y llevar su nombre en el uniforme, fue un éxito para él.
En el año 2010, un ya experimentado Elvin tuvo la oportunidad de participar en la Copa del Mundo en Atlanta, Estados Unidos, en lo que fue “un ambiente que me sacudió e impresionó, al observar el nivel de tiradores que participaron”, comentó. Ese mismo año tuvo una gran competencia: los XXI Juegos Centroamericanos y del Caribe, Mayagüez 2010, Puerto Rico, lo que fue la primera experiencia para el tirador chiquimulteco en esta competencia.
Al finalizar la competencia, el colectivo guatemalteco concluyó cuarto, a tan solo dos puntos de la tercera posición. De manera individual, finalizó undécimo. El alto nivel del certamen lo inspiró a mejorar y a seguir compitiendo. Por lo que también en 2010 consiguió su plaza para participar en los I Juegos Olímpicos de la Juventud, Singapur 2010. “Le dediqué muchas horas de entreno para lograr la ansiada clasificación, plaza que gané quedando segundo del continente “, recordó.
La prueba de rifle de aire contó con la participación de 20 atletas; el tirador nacional concluyó en la posición número 16 con un puntaje de 582 puntos, el cual fue su mejor registro ese año.
Luego del evento, Elvin empezó a sufrir un deterioro en su condición física, lo cual lo llevó a la difícil decisión de retirarse del deporte de sus amores.
Tras retirarse, optó por capacitarse en diferentes cursos impartidos por Confederación Deportiva Autónoma y el Comité Olímpico Guatemalteco. “Me impulsó prepararme académicamente por el mismo amor al deporte, el querer saber más del mismo y ayudar a las nuevas generaciones”, indicó.
A partir del año 2013, inició como entrenador de la Asociación de Tiro Deportivo del departamento de Guatemala, donde busca mejorar el desarrollo e incentivar a los atletas a practicar el deporte.
Luego de años de práctica y múltiples capacitaciones, en el año 2018 logró convertirse en el entrenador de atletas de primera línea, siendo contratado por el Comité Olímpico Guatemalteco para cumplir con las funciones como entrenador de tiro deportivo en la Federación de Tiro Deportivo de Guatemala. “Tengo la posibilidad de cambiar la vida de una o varias jóvenes de manera positiva, tanto en lo deportivo como en lo personal”, concluyó.
