El inminente reinicio de la competición de Liga (quedan 10 días para jugar en Mallorca) y el primer entrenamiento de ayer con todos los compañeros juntos en la Ciutat Esportiva son argumentos de peso para que la adrenalina de los jugadores de Quique Setién vaya en aumento después de un confinamiento que les bloqueó. Costó arrancar, pero las sensaciones del vestuario son ahora ya buenas, después de tres semanas y media de entrenamiento individual.
El Barça está en marcha y en este club es Leo Messi quien marca siempre el pulso. Y el feeling del ‘10’ es extremadamente positivo. El argentino está muy motivado para reiniciar la competición con la idea de sumar una nueva liga en su dilatado palmarés. Quedan once finales para que Messi gane su undécimo campeonato de Liga. Superaría a Pirri y estaría a una de Paco Gento (12).
Al mismo tiempo, Leo está ilusionado con la disputa de la Liga de Campeones, independientemente del formato que tenga porque la UEFA todavía no lo ha definido. Es el trofeo que todos ansían. Y Leo el primero de todos. Hace ya cinco años de la final de Berlín, demasiado para un ganador como él.
Los retos deportivos están allí en un calendario diferente al habitual por culpa del coronavirus. Y es en estas circunstancias ESPN ha destapado una noticia clave para el futuro del jugador: Leo Messi no hace uso de la cláusula que figura en su contrato de irse libre a final de temporada.Su actual contrato acaba en 2021, pero este verano tenía la opción unilateral de abandonar el club sin traspaso alguno. Messi ha rechazado hacer uso de ella.
La noticia fue confirmada tanto por el entorno del jugador como por el club aunque existen algunos matices de escasa importancia. Según el club, Leo tenía cinco días hábiles después de la final de la Champions para comunicar su deseo de irse. Esto sería el próximo viernes 5 de junio. Sin embargo, ESPN lo da por hecho porque en realidad este es el sentir de Leo Messi y del FC Barcelona. Ninguno se imagina con una ruptura traumática a estas alturas de carrera.
COMPOMISO TOTAL
Tanto en el club como el jugador le daban relativa importancia a esta fecha porque no existía voluntad de hacer efectiva la cláusula dado el compromiso de Leo con el Barcelona, una vinculación que se extiende desde los 13 años, cuando llegó, a ahora que está a punto de cumplir los 33.
Messi quiere estar en el Barcelona en las verdes y en las maduras por lo que no ve otra opción que la de seguir. No dejaría tirado al Barça, y menos en las circunstancias actuales, en medio de una competición y con el Covid-19 de por medio.
El caballo de batalla será durante la próxima temporada en la que Josep Maria Bartomeu quiere asegurarse su continuidad pese a que él deje de ser presidente el 30 de junio. Su deseo es atar a Messi para un futuro y deberá sentarse con su padre Jorge para intentar llegar a un acuerdo, en el caso de que Leo así lo desee. Esto será a futuro.
Ahora toca seguir disfrutando del compromiso que siempre ha mostrado este jugador con el Barcelona. Ha tenido opciones de irse, ha atravesado por malos momentos, ha vivido tensiones pero siempre ha sido fiel a la entidad que le acogió siendo un niño, una promesa.