Los dos altos cargos de la FIFA detenidos este jueves en Zúrich acusados de supuestos cargos de corrupción se han opuesto a su extradición a Estados Unidos, según informó el ministerio de Justicia de la Confederación Helvética.
En un comunicado, el ministerio confirma que los detenidos son Alfredo Hawit, presidente de la Confederación Centroamericana de Fútbol (Concacaf) y vicepresidente de la FIFA; y Juan Ángel Napout, igualmente vicepresidente de la FIFA y presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
Hasta la fecha las autoridades suizas no habían confirmado el nombre de los detenidos, aunque la prensa estadounidense los había adelantado.
La Policía Judicial de Zúrich interrogará hoy a los dos dirigentes, que permanecerán detenidos a la espera de que Estados Unidos envíe una solicitud oficial de extradición.
Estas demandas deben ser presentadas en un plazo de 40 días, tal y como establece el tratado de extradición en vigor entre Estados Unidos y Suiza.
Durante ese periodo, los detenidos pueden elegir ser extraditados con un procedimiento simplificado y no esperar a que las autoridades de la Confederación Helvética se pronuncien sobre si autorizan o no dicha extradición.
La Justicia estadounidense les acusa de haber recibido sobornos que se elevan «a millones de dólares» a cambio de la venta de los derechos de retransmisión de torneos futbolísticos disputados en América Latina y partidos de clasificación para Mundiales de Fútbol.
Según la información aportada por las autoridades de Estados Unidos a sus homólogos suizos, algunos de esos delitos fueron acordados y preparados en territorio estadounidense y los pagos se habrían realizado a través de bancos de ese país.
Los altos cargos de la FIFA se encuentran en Zúrich con motivo de la reunión del Comité Ejecutivo que concluye hoy.