«Dios hizo justicia, de ella nadie se escapa, he quedado libre y ahora me enfocaré en trabajar en mi equipo porque se nos viene un torneo complicado. Fue difícil estar 12 horas sentados, pero soy libre”, le expresó a al Diario DIEZ , de Honduras el guardameta hondureño José Mendoza, uno de los ocho jugadores del equipo Xelajú acusados de agredir a otro miembro del club. Los futbolistas quedaron en libertad bajo fianza y ligados a proceso judicial.
El Juzgado ligó a proceso y dejó en libertad bajo fianza, con arraigo, a los ocho jugadores del Xelajú que se entregaron voluntariamente ayer a las 5:00 de la mañana para declarar por el caso de agresión contra el jugador Mario Humberto Ramírez de 15 años de edad, quien los denunció por maltrato cuando lo iban a rapar el 20 de diciembre, un ritual que se hace con los jugadores que debutan en algunos clubes.
Los imputados Sergio Morales, Juliano Rangel y José Alberto Mendoza, fueron ligados por agresión sexual,. Mientras que Kevin Eduardo Arreola, Julio Estacuy, Israel Silva Matos, Edgar Chichilla y Milton Gary Leal quedaron ligados a proceso por maltrato en contra menores.
El ex portero de la selección de Honduras que participó en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y en el Mundial Sub-20 de Egipto, afirmó que durante el proceso, el equipo Xelajú les brindó todo el apoyo. “No nos quejamos, los directivos estuvieron con nosotros en todo momento y eso se lo agradecemos”, comentó Mendoza, quien desde ayer sigue en los entrenos del equipo.
