A sus 36 años, cumplidos el pasado 30 de mayo, Iker Casillas podría jugar en el Liverpool la próxima temporada. De cuantas ofertas ha recibido el guardameta, numerosas y de muy diferente procedencia, considera la más sólida la del club inglés, que este domingo certificó su presencia en la fase previa de la Liga de Campeones al concluir cuarto en la Premier League. Algunas fuentes aseguran que podría incluso haber pactado un precontrato con el club de Anfield.
Casillas parece decidido a poner fin a su estancia en el Oporto después de dos temporadas en las que parte de su sueldo lo abonó el Real Madrid, tras el acuerdo que alcanzó para dejar la entidad blanca. Firmó con los ‘dragones’ en verano de 2015 hasta junio de 2017 y pese a que en mayo del año pasado hizo intención de ampliar su contrato por una temporada, no llegó a firmarlo.
Ahora está dispuesto a aceptar alguna de las propuestas que le han llegado de la Premier League, de Turquía o de ligas de menor fuste como Qatar o China. Sin embargo, el Liverpool, un histórico del fútbol continental que ha conquistado cinco Copas de Europa, le daría la oportunidad de seguir jugando la Champions y ampliar así su récord de partidos en la competición, que ya ostenta, con 175 (157 de ellos en el Madrid), uno más que el italiano Maldini y dos más que Xavi Hernández.
Pese a que el Oporto perdió la Liga con el Benfica, Casillas ha cuajado una temporada magnífica, en la que encajó sólo 23 goles en 43 partidos. En 23 mantuvo su portería a cero. Ahora se siente aún con capacidad para seguir en la élite y para competir con un guardameta como el belga Mignolet, que esta temporada ha salido a gol por partido en el Liverpool. Casillas regresó ayer a Madrid con su familia para iniciar sus vacaciones. El Oporto regresará al trabajo el 3 de julio, pero él probablemente estará muy lejos.