El Gobierno húngaro ha anunciado este jueves que abre al público los estadios de fútbol, al igual que los cines y teatros al aire libre, así como piscinas, aunque con estrictas medidas para evitar contagios de la COVID-19.
De esta manera, desde hoy mismo se pueden jugar partidos de fútbol u otras pruebas deportivas con público, pero dejando al menos tres asientos vacíos entre cada espectador.
También se debe dejar espacio libre delante y detrás de cada asistente, de tal manera que haya al menos un metro y medio de distancia, explicó el ministro de Gobernación, Geregly Gulyás.
Los partidos de primera división y la Copa Húngara ya se habían reanudado el pasado sábado, pero a puerta cerrada.
En Hungría actualmente hay 3.816 casos confirmados de coronavirus y 509 fallecidos.