La octava etapa de la Vuelta a Guatemala tendrá un recorrido nunca antes visto, con la salida y la meta en lugares especiales para el turismo del país.
Los ciclistas saldrán con la hermosa vista del lago Atitlán, pues el punto de partida será frente a la municipalidad de San Pablo La Laguna, y tendrán que pedalear casi como en un viaje al pasado, pues la meta estará ubicada dentro del parque arqueológico de Iximché.
Con solamente 90 kilómetros de distancia entre ambos puntos, este será el recorrido más corto, si no contamos la contrarreloj (43 km.), pero también podría ser uno bastante exigente por la zona montañosa que tendrán que atravesar, sobre todo al inicio de la etapa.
Tanto así, que tres de los cinco premios de montaña que deberán enfrentar los competidores están entre el kilómetro 7.7 y el 38 del trayecto. Los primeros dos serán de primera categoría y el siguiente de tercera.