Si el fútbol se midiera por el valor monetario de sus protagonistas, Argentina sería la gran favorita a ganar la Copa América, mientras que Brasil estaría en segundo lugar y Uruguay en tercero. La realidad dice que no estamos tan lejos de esta aproximación, aunque los charrúas ya se quedaron fuera y Brasil está muy lejos de ser el equipo todopoderoso que solía asustar hace algunos años.
Las diferencias entre algunas plantillas, sin embargo, son abismales, lo cual se suele traducir en el campo. El plantel más caro es el de Argentina, dominado por los 134 millones que vale según Transfermarkt Lionel Messi, el mejor jugador del mundo. Como bien reporta El País, al precio de Leo se le suman el de Di María e Higuaín, que se ha revalorizado tras una temporada brillante en el Nápoles, y entre los tres suman 268 millones de dólares.
Brasil sigue a Argentina, y su valoración económica disminuye en gran medida con la ausencia de Neymar, cuya ficha estaría alrededor de los 112 millones de dólares. Ante la ausencia del crack del Barça, el jugador más caro de la canarinha es Lucas Moura, uno de los convocados de último minuto ante la ausencia de Douglas Costa, que vale 39 millones de dólares. El segundo jugador más caro de la competencia es Luis Suárez, cuya ficha costaría alrededor de 100 millones de dólares.
Le siguen en la lista James Rodríguez, que vale 78 millones y Alexis Sánchez, alrededor de los 55. Edinson Cavani levanta mucho el precio del plantel uruguayo, cuyo costo rondaría los 300 millones de dólares.
La otra cara de la moneda apunta a Centroamérica y a los países andinos. Bolivia es la selección cuya plantilla cuesta menos, alrededor de los tres millones de dólares: sólo Lucas Moura vale más de diez veces más que todo el equipo verde. Le siguen Panamá, que vale 8, Haití, 10, y Perú, 18. En la selección blanquirroja el jugador más caro es Paolo Guerrero, cuya ficha estaría alrededor de los 4,5 millones, aunque está claro que el equipo de Gareca sería más caro con la presencia de Zambrano, Farfán, Pizarro y Vargas.