La paciencia se acabó en Leicester. Los ‘foxes’ ha hecho oficial la destitución del entrenador que les hizo tocar la gloria la temporada pasada, Claudio Ranieri. El italiano, de 65 años, ha sido cesado tras la mala situación que el equipo atraviesa en la Premier. Competición donde ocupa la decimoséptima posición con 21 puntos, uno más que la zona de descenso.
A falta de 13 jornada para que finalice la Premier, el vigente campeón sólo ha sumado cinco victorias. Agravándose su situación en lo que va de 2017, donde todavía no sabe lo que es marcar en la competición liguera. Esa falta de atino de cara a puerta le ha hecho sumar sólo un punto, cosechando cinco derrotas en sus últimos cinco encuentros.
Además, su situación en las otras dos competiciones en Inglaterra no fue mucho mejor. En la Copa de la Liga cayó en la primera ronda que disputó por 2-4 ante el Chelsea. Peor fue su actuación en la FA Cup, siendo eliminado en octavos de final (1-0) en manos de Millwall, de la League One (tercera categoría del fútbol inglés).
La única sonrisa que han despertado los ‘foxes’ a sus aficionados ha llegado en la Champions League. Competición donde se encuentran jugando los octavos de final, ronda en la que perdieron 2-1 en el partido de ida ante el Sevilla, después de acabar primeros de grupo.