Josep Maria Bartomeu confirmó que no hablarán con Luis Enrique de su renovación hasta los meses de abril y mayo. El presidente del Barça dice que “no hay plan B” y que la voluntad de la actual directiva es que el asturiano siga porque “es el entrenador que ha continuado” el proyecto ganador del Barça en los últimos años. Sin embargo, admitió que no podrá empezar las conversaciones para su continuidad hasta muy avanzada la primavera con lo que el equipo quedará en la misma situación de indefinición que hace dos años antes del triplete. Ni siquiera en la conferencia de prensa posterior a la final de Champions de Berlín ante la Juventus quiso confirmar Luis Enrique que seguía.
El escenario, no obstante, es similar al que el Barça se encontró cuando llegó Guardiola, quien después de firmar un primer contrato por dos temporadas (hasta junio de 2010), fue renovando su compromiso por temporada. En enero de 2010 firmó hasta junio de 2011 y en febrero de 2011 firmó hasta el final de la temporada 11-12, cuando decidió marcharse. No obstante, sólo la última temporada mantuvo la incertidumbre hasta el final. En el caso de Luis Enrique, es la segunda vez que lo hace.
