El Everton tiene un antes y un después tras el fichaje de James Rodríguez. El volante colombiano luce como si llevara toda su vida en la Premier League, pero lo cierto es que recién se adapta a su nueva casa. La llegada del cucuteño a los ‘Blues’ continúa acaparando a todos. Y no quedan dudas que sus compañeros son los que más felices están.Dominic Calvert-Lewin es sinónimo de gol por estos días en Inglaterra. Lo que toca el ariete acaba inflando la red contraria. Se puede decir, con base a las estadísticas (ocho goles en cinco juegos), que el nacido en Sheffield pasa por su momento de gloria como profesional, y es por ello que Gareth Southgate se ha sacado el sombrero y lo ha citado para los compromisos del combinado inglés.
Empieza a ser el ‘panita’ de todos. Con los de adelante y también con los de atrás. Otro claro ejemplo es Séamus Coleman. El lateral derecho estuvo entrando y saliendo en la última temporada, dando espacio en esa posición a Djibril Sidibé, pero el irlandés es el retrovisor de James, y si bien en ocasiones le cubre la espalda, cuando sale como un misil el cucuteño siempre le busca.
André Gomes, Allan, Michael Keane, Lucas Digne… el listado es amplio y James tiene mucho valor en esto. Cuando frota la lámpara, los ‘Toffees’ vuelan. Tal como lo manifestó Fabian Delph. «Todo el mundo está volando en el entrenamiento, todo el mundo lo está haciendo bien», sostuvo el mediocampista de 30 años.Así las cosas, una nueva prueba de fuego está a la vuelta de la esquina. Mientras los de Liverpool se preparan para la visita del Brighton, Rodríguez sigue silenciando a sus detractores y continúa dándole ‘alas’ a sus compañeros, que ya empiezan a volar en esta 2020-21, ganándose un lugar en sus respectivas selecciones.
