El Barcelona recibió la visita del Liverpool en el juego de ida de las semifinales por la Champions League.
El primer tiempo fue de emoción con un Barcelona queriendo tener la pelota, pero se encontró con un Liverpool que siempre buscaba la ofensiva encabezados por Mohamed Salah que se tiraba metros atrás para hacerse del balón y un Mané que explotaba su velocidad y complicaba a la defensa local.
El Barcelona se pondría en ventaja al minuto 26 en una jugada que parecía tener controlada el cuadro inglés, cuando Jordi Alba por la izquierda mandó un centro al área y a las espaldas de los defensores apareció Luis Suárez, quien de pierna derecha le anticiparía al arquero Alisson y conseguiría el 1-0.
Pese a la desventaja, el Liverpool no renunció a buscar el empate y arriesgó al adelantar sus líneas, pero el marcador no tuvo ningún cambio por lo que se fueron al descanso con el 1-0 para el Barcelona.
En el segundo tiempo el Liverpool comenzo a dominar llevando peligro a la portería de Ter Stegen que se convertiría en en figura con atajadas precisas manteniendo su arco en cero tras los remates de Milner y Salah.
Cuando todo parecía que el Livepool podría empatar las acciones apareció Messi que sobre el minuto 75 en una jugada donde Suárez remataba al travesaño y en el rebote el mismo Messi aparecería para definir con el arco vacío y poner el 2-0 y darle tranquilidad al Barcelona.
Leo Messi guardaría para la recta final del partido su “obra de arte” cuando al minuto 82 cobrara un tiro libre desde unos 25 metros poniendo la pelota en el ángulo del arco de Alisson y poner el 3-0 y su doblete en el partido.
El Liverpool tuvo la posibilidad de descontar, pero el Barcelona salvó en la línea en primera instancia y en la segunda pelota Salah la estrellaría en el poste.
De esta manera el Barcelona con su triunfo de 3-0 buscará certificar su boleto a la final la próxima semana cuando visiten al Liverpool en Anfield.