Gareth Bale no entró demasiado en juego en la final. Disfrutó de dos ocasiones claras, pero las mandó fuera. Sin embargo, fue decisivo al marcar el 2-1 en la segunda parte de la prórroga, el gol que culminó la remontada del Real Madrid y que abrió el camino para el 4-1 definitivo. Hizo un gol de puro nueve, cabeceando en el segundo palo tras el rechace producido por un despeje de Courtois a disparo de Di María. Y no es la primera vez, el galés se está especializando en ‘mojar’ en los partidos por el título. Como en la Copa del Rey.
Ya entonces el británico definió el choque por el torneo español del KO con un carrerón impresionante, llegando a salir y volviendo a entrar en el campo y fundiendo a Bartra en carrera para luego anotar pasando el balón bajo las piernas de Pinto. Entonces fue la 19ª Copa del Rey; hoy fue la Décima Copa de Europa para el Madrid.