El pentatleta guatemalteco Andrés Fernández, sigue soñando despierto. Recién consiguió el boleto a los Juegos Olímpicos de París 2024 gracias a su buena participación en los Juegos Panamericanos de Santiago.
Con 22 años cumplidos, Andrés es una de las promesas del pentatlón moderno nacional y protagonista de nuestra entrevista de esta semana. Promesa y realidad, porque ya su nombre suena en todo el continente.
Platicamos con él y nos contó cómo descubrió el pentatlón, qué le gusta hacer fuera del deporte, cómo reaccionó cuando se enteró de su clasificación para París 2024, y mucho más. A continuación la entrevista completa.
¿De niño qué deportes practicabas?
Yo era bastante activo y mis papás me metieron a natación a los 3 años, aunque dejé de hacerlo un tiempo e hice béisbol, voleibol, balonmano y corría.
¿Cómo descubriste el pentatlón?
Gracias a mi hermana (Gabriela Fernández). Yo la veía entrenar esgrima y decía: eso quiero hacer yo. Empecé en el 2015 (tenía 14 años).
¿Qué significa el pentatlón en tu vida?
Demasiado. Me ha abierto las puertas para representar a Guatemala en otros países. También compartir con buenas amistades. Pero quizá lo que más me motiva es competir, me gusta demostrar que puedo hacer las cosas y sentir esa adrenalina.
Y con tu hermana (Gabriela) a la par…
En realidad ella es como mi motor, todo el tiempo me anda aconsejando y empujando en los días difíciles. La admiro, ella siempre tiene ganas de entrenar y una energía muy especial.
¿Ha cambiado el deporte tu vida?
Definitivamente. Ahora entiendo lo que es la disciplina y entrenar todos los días de cuatro a seis horas. Duermo más para reponer energías y cuido siempre mi alimentación.
¿Algún sacrificio?
No lo veo así, pero el tiempo de compartir con familia y amigos, puede ser. Ya habrá momento para hacerlo.
¿Tenes referentes en el deporte?
Varios. Uno de ellos es Charles Fernández (ex pentatleta). Lo aprecio y respeto mucho. Crecí en este deporte con consejos suyos. Además de ser buena onda, ayudaba bastante, siempre nos daba ánimos para bien. Es un orgullo estar en competencias como en las que el estuvo y destacó.
¿Como es la relación con tu entrenador?
Con Walid Sayed (de nacionalidad egipcia) se aprende todos los días. Trabaja con énfasis en lo físico, pero también en lo mental. Me ha apoyado en la confianza propia. Me dice siempre -cuándo vas a confiar en ti, hay que hacerlo-. Y eso lo he aplicado en mi vida fuera del deporte, ahora creo más en lo que soy y en lo que puedo realizar.
¿Qué se siente representar a Guatemala?
Es lo mejor de lo mejor. Uno presume con orgullo los colores y es genial que ahora nos reconozcan en todo el mundo por el nivel del pentatlón. Ya saben qué es Guatemala y más bien preguntan con curiosidad.
¿Si no fueras pentatleta, qué serías?
Mmm (risas). Creo que me dedicaría a lo artístico. Me entretiene producir música, en la pandemia lo confirmé. No veía tele ni otras cosas, me metí en la música y en probar mezclar sonidos. Creo que es mi gran entretención, y por qué no, más adelante quizá me dedico a eso.
¿El 31 de diciembre de este año, por qué cosas dirás gracias?
Primero a Dios, le agradeceré tanto por este año que ha sido sensacional. También a mi familia que están atrás de todo esto. Me ayudan, me patrocinan y me dan consejos. Son mi ejemplo. A mi hermana que me manda a entrenar (risas) y a toda la gente de la Asociación Nacional de Pentatlón Moderno que me acompañan en todo momento y me hacen la vida más fácil, porque hacen cosas que yo ni sé para que pueda viajar y competir.
¿Qué es lo mejor que te pasó este 2023?
Sin lugar a dudas mi clasificación a los Juegos Olímpicos de París 2024, que conseguí en los Juegos Panamericanos.
¿Cómo se lo contaste a tu familia?
Mi mamá, hermana, novia y gente de la Asociación estaban en Santiago y se enteraron de primero y en persona. Abracé a mi mamá y lloré. A los demás (papá, tíos y primos) en un grupo de WhatsApp familiar. Les escribí: Hola, solo les vengo a informar que estoy oficialmente clasificado a los Juegos Olímpicos de París 2024. Todos me respondieron diciéndome cosas bonitas.
¿Qué sentiste de saber que irías a los Juegos Olímpicos?
Fue muy chistoso porque yo no me percaté en el instante. Entré a la meta (sexta posición) y pensé en lo complicado que había sido la competencia. Procesaba lo que había vivido, cuando en eso vi a mi mamá, hermana y novia llorando, se acercaron y me dijeron -clasificaste, clasificaste-. Yo pensé que me estaban molestando, hasta que ya tranquilo conté bien las posiciones y confirmé que tenía una de las plazas que daba la prueba. Wow, es algo que todavía aterrizo, pero es un sueño.
¿El 2024 será un año especial y diferente?
Quiero prepararme de la mejor manera, enfocarme en mis objetivos y disfrutar también porque puede ser algo único.
¿Hay Andrés para rato en el pentatlón?
Me gustaría terminar este y hacer un ciclo más. Llegar a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. Luego, ayudar en todo lo que pueda a las futuras generaciones y disfrutar otras cosas de mi vida.