Solo once capitanes lo han levantado a lo largo de la historia. Otros 32 sueñan con hacerlo el domingo 15 de julio en Moscú. Para unos es casi una obligación, para otros una ilusión y, quizás para la gran mayoría, no pase de un amor platónico. Se trata de la Copa Mundial, el trofeo con el que FIFA acredita la condición de campeón del mundo de fútbol y que Iker Casillas, que lo levantó en 2010, presentó hoy ante el público del Estadio Luzhniki, en la ceremonia inaugural de Rusia 2018.
Diseño, peso y valor del trofeo de la Copa del Mundo
El actual diseño data de principios de 1972, después de que la FIFA entregara el trofeo primigenio, la Copa Jules Rimet en propiedad a Brasil tras conquistar su tercer Mundial (después, en 1983, fue robada y destruida). La federación internacional convocó entonces un concurso al que se presentaron 53 diseños de artistas de siete países. La propuesta ganadora fue la idea del italiano Silvio Gazzaniga —autor también de otros trofeos, como la Copa de UEFA— que representa a dos figuras humanas sosteniendo la Tierra como símbolo de la alegría y la grandeza del deportista en el momento del triunfo. La producción fue encargada también a una empresa transalpina, la joyería GDE Bertoni de Milán, que sigue ocupándose de la conservación del trofeo antes de la final.