Otro abrazo descorazonador de Gareth Southgate. El técnico inglés sentía la angustia que abrumaba a Bukayo Saka, el juvenil delantero que había fallado el penal que había sentenciado la derrota de su selección en una final.
Con una experiencia previa de haber marrado un penal decisivo en un partido del Campeonato Europeo en el estadio Wembley, Southgate mejor que nadie sabía lo desolador que puede ser el momento.
Southgate no termina de sacudirse lo ocurrido hace 25 años, cuando marró su disparo en las semifinales ante Alemania. Asumió la responsabilidad por la derrota ante Italia el domingo, por asignarle a Saka la tarea de cobrar el último penal de la Euro 2020 — un disparo que fue atajado por Gianluigi Donnarumma.
“No está solo”, dijo Southgate. “Vamos a apoyarle y ayudarle. Creo que recibirá mucho cariño desde todas partes”.
Las decisiones de Southgate fueron el foco de la atención. ¿Era prudente pedirle a un jovencito de 19 años dar un paso al frente en un momento de tata presión?
Raheem Sterling, campeón en la Liga Premier y en su cuarto torneo con la selección, ni siquiera fue incluido en el quinteto de encargados de los remates para una definición que acabó con Italia alzando el trofeo de campeones.
La estrategia de Southgate será cuestionada por mucho tiempo en un país ue ansiaba ganar su primer gran título desde el Mundial de 1966.
Marcus Rashford y Jadon Sancho ingresaron a los 120 minutos, a tiempo para para la definición desde los once pasos. Rashford jugó como lateral derecho al sacrificarse a Kyle Walker para la inminente tanda. Jordan Henderson, jugador curtido en un Liverpool que en años recientes ganó un título de la Premier y otro en la Liga de Campeones, dio paso a Sancho para los penales.
Era pedirle demasiado a Rashford y Sancho tras pasar sentados en la banca casi toda la noche. Fallaron sus remates previo al de Saka, con los ingleses sucumbiendo 3-2.
“Yo asumo la responsabilidad”, dijo Southgate. “Yo fui el que decidió quiénes iban a rematar los penales en base a lo que hicimos en los entrenamientos. Nadie anda por su cuenta. Fue mi decisión y todo recae en mí”.
Alan Shearer, quien anotó el primer penal de Inglaterra previo al fallo de Southgate en la Euro 1996, cuestionó la decisión de su ex compañero de selección.
“Mentalmente hay que estar bien concentrado”, dijo Shearer a la BBC. “Llevas dos horas sin patear un balón”.