El derbi de Manchester se ha convertido ya en el Guardiola contra Mourinho. Ambos han tratado de negarlo en la previa, pero la realidad en las calles de la ciudad es que sólo los dos centran el debate. La rivalidad entre los dos equipos ha subido ya de tono en los últimos años por el impulso económico del City y se prepara ahora para un salto descomunal. Este partido tiene ahora una dimensión mundial parecida a la de el Clásico. Lo que Sir Alex Ferguson denominó un día como el “vecino ruidoso” amenaza con convertirse en un estruendo para los Red Devil.
Más de un peso pesado de Old Trafford dudaba del carácter y estilo de Mourinho, pero acabaron aferrándose a él porque, con sus pros y sus contras, lo ven como la única solución posible para contrarrestar el fenómeno de Guardiola. El portugués sólo ha logrado ganar en tres de sus 16 enfrentamientos directos (y 6 empates) ante el catalán, pero en Inglaterra recuerdan que también, a su manera, puso un dique a su Barça del sextete para acabar incluso obligándole a tomarse un año sabático.
En Old Trafford esperan que Mourinho vuelva a convertirse en la pesadilla de Guardiola para evitar que el rojo clásico de la ciudad (71 victorias para el United en 171 partidos por sólo 49 del City) pase a ser azul. La Premier League también se frota las manos. A falta de Cristiano y Messi presume de entrenadores (los dos junto a Conte, Klopp, Wenger y Pochettino) para seguir autodenominándose como la mejor liga del mundo. Será sólo un amistoso, pero la temporada 2016-2017 en Inglaterra se vislumbra mejor que nunca.
