Su cuna fue Cobán, pero la búsqueda por alcanzar el sueño de ser ciclista de renombre lo llevó a integrar las filas de la Asociación de Sololá. Hoy, con 21 años de edad, sus ansias por trascender y cumplir sus objetivos inspiran a otros a emular su perseverancia, por ello, Roberto Pop Laj se hizo digno acreedor del suéter de Valores Olímpicos.
El 2017 marcó el camino de Roberto para hacer del ciclismo su forma de vida. «Soy cobanero representando a Sololá, alla no hay ciclismo de ruta y por eso es que busqué la oportunidad con la Asociación», comparte, sin olvidar mencionar que es gracias a su hermano Luis que ahora se dedica a este deporte, pues él también lo practica.
La 59 Vuelta Ciclística a Guatemala es apenas su segunda experiencia en este evento, y aunque un pinchazo puso en dificultad su continuidad en la cuarta etapa, sabe que el que persevera, alcanza. «Yo siempre quiero terminar todas las competencias y más una Vuelta; nunca he abandonado, abandonar sería un fracaso para mí», expresa.
Ahora, cada triunfo obtenido lo dedica a su hermano menor fallecido, a su madre Olivia Laj y a su equipo. «Me inspiran a seguir adelante y a practicar este lindo deporte. Las fuerzas vienen del corazón, porque físicamente a veces ya no doy más», agrega el joven pedalistas, cuyo sueño es ganar una Vuelta a Guatemala. «Solo espero terminar bien esta edición y hacer las cosas mejor que hace un año», enfatiza.
Su espíritu ganador le permitió colocarse el suéter de Valores Olímpicos, el cual lo inspira a ser mejor atleta. «Me siento agradecido con este reconocimiento del Comité Olímpico Guatemalteco por mi esfuerzo. Quiero ser ejemplo para mis compañeros, que jamás se deben rendir», finaliza.
