Los días pasan y el panorama de Sanarate se complica más ante la crisis económica y administrativa en la que se está inmersa. No hay una persona que tome la batuta, que establezca un diálogo e inicie una planificación. Son alrededor de 10 jugadores los que han dejado el club con alta posibilidades de establecer una demanda por el salario adeudado.
“Es una tristeza. Espero que no dejen el club a la deriva y lo dejen morir porque la afición del pueblo de Sanarate no se lo merece. La verdad que son sentimientos encontrados porque los muchachos que dirigí fueron muy profesionales a pesar de todas las vicisitudes que tuvimos en tan corto tiempo. Fue una situación bien tremenda”, expresó el entrenador Víctor Gómez en entrevista con ESPN.
Gómez llegó al equipo de “La Máquina Celeste”, tres días antes de iniciar el torneo Clausura 2020 ante la renuncia de Rafael Díaz. Junto a su asistente Julio Girón, dirigieron los 13 partidos del campeonato previo a su cancelación por la propagación del COVID-19.
“No se logró tener ese equilibrio administrativo como club y fue lo que nos afectó. El desenlace fue cuando cancelaron el torneo y la mayoría de jugadores comenzaron a marcharse. Creo que no era lo que los futbolistas merecían por parte del club y ahora hay que esperar para ver que se resuelve con las personas que lleguen a tomar las riendas del club”, agregó ‘El Piojo’ Gómez.
Según la denuncia pública por parte del Sindicato de Futbolistas Profesionales de Guatemala (SIFUPGUA), a la plantilla de Sanarate se le adeuda un porcentaje del mes de febrero y tres cuotas restantes.
“Sigo teniendo la convicción que aún se puede hacer algo. Incluso no me he despedido de la afición porque tampoco se han comunicado conmigo a decirme nada sobre mi futuro. No he tenido ningún acercamiento con las personas que podrían hacerse cargo del equipo, que ya deberían de estar platicando con los pocos jugadores que se quedaron. Incluso, con los que se fueron para arreglar el tema de las deudas”, comentó el técnico nacional que tuvo su primera experiencia en Liga Nacional.
Sumado a los inconvenientes económicos con los jugadores, demandas ante FIFA y la salida de la mayoría del plantel, la semana pasada se conoció la renuncia del presidente Jahiro Otsoy, aduciendo temas personales. Situación que complica aún más la gestión del equipo en la categoría mayor.
“La verdad que se torna un panorama muy complicado. Estoy a la espera de lo que se pueda determinar para buscar una solución y que se rescate al equipo. Tengo fe que si no será en el equipo de Sanarate, será en otro club donde iremos a trabajar y que se valore el trabajo de uno”, puntualizó el entrenador Víctor Gómez. (ESPN).
