Esta es una nota publicada por el Gráfico de El Salvador y que reproducimos:
Dos testigos con conocimiento directo a quienes se garantizó el anonimato declararon ante personeros de FIFA en 2011 y aseguraron que el ex zaguero central y ex capitánde la selección, Marvin González, ofreció $10 mil a uno de ellos para perder en el partido que la selección nacional jugó en Tampa Bay, E.U.A., el 24 de febrero de 2010.
González le dijo a este jugador, al intentar reclutarlo, que el portero y la defensa, sin mencionar nombres de jugadores, eran parte del plan, y que al menos siete jugadores estaban adentro de aquel complot.
Esas posiciones fueron ocupadas esa noche por Miguel Montes, Manuel Salazar, Marvin González, Deris Umanzor y Alexander Escobar.
Asimismo, los testigos sostienen que del dinero recibido de los apostadores para dejarse vencer, se destinarían $9 mil dólares para pagarle a Mardoqueo Henríquez, a pesar de que no jugó esa vez por una lesión.
Las declaraciones de ambos testigos fueron consignadas en un informe que está en poder de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) y del cual una fuente internacional cercana a la investigación brindó copia a El Gráfico.
Estos nuevos señalamientos sobre arreglos para beneficiar a los apostadores en ese partido amistoso se suman a los que hizo la cadena internacional ESPN en un reportaje que emitió en 2012 y a los del mafioso singapurense Wilson Raj Perumal al periódico de Singapur “The New Paper” a través de unas cartas desde su confinamiento europeo, mismas a las que Grupo Dutriz también tuvo acceso y que se publicaron en 2011, cuando el tema salió a la luz pública en el fútbol local.
En aquella oportunidad se señalaron los supuestos arreglos de partidos del FAS en la Liga de Campeones de la CONCACAF en 2010, la firma del contrato con la empresa “tapadera” Exclusive Sports para montar el partido de la selección nacional contra Costa Rica en Ciudad Quesada en octubre del mismo año y el encuentro amistoso de El Salvador contra Estados Unidos en Tampa Bay, sobre el cual se vierten estos dos testimonios.
MANOS ASIÁTICAS
El partido que El Salvador perdió ante Estados Unidos el 24 de febrero de 2010, en Tampa, Florida, fue amañado por mafiosos asiáticos para beneficiarse apostando al resultado.
Las cartas que Wilson Raj Perumal escribió desde la cárcel denunciaban que el partido fue amañado; inicialmente, él influiría en el juego pero miembros de su equipo lo traicionaron para llevar a cabo el negocio a favor de otros mafiosos.
“A Jay Prakash S. Rajoo, también conocido como Danny, le asigné una misión transoceánica, la de coordinar un partido internacional amistoso en Estados Unidos en febrero de 2010. Pero Danny me engañó, me hizo creer que los jugadores no estaban de acuerdo con mi trato. Al día siguiente, me di cuenta que había llevado a cabo el negocio, pero no conmigo sino con un inversionista desconocido”, contó Raj.
El encuentro concluyó 2-1 luego de que El Salvador se pusiera adelante en el marcador. Los norteamericanos al final ganaron con un gol al minuto 89, luego de un fallo defensivo.
El informe de FIFA recoge que antes de comenzar el partido en Tampa, uno de los jugadores fue abordado por Marvin González, quien le ofreció $10 mil por ser parte de un plan para arreglar la derrota.
Según el reporte de las entrevistas, González le aseguró al testigo que al menos siete jugadores de aquel grupo eran parte del plan, pero que aún así buscaba un elemento más. Sostuvo que él controlaba a la defensa y al portero, pero que ahora lo que necesitaba era un volante.
El partido era el primero que José Luis Rugamas dirigía como seleccionador nacional luego que el mexicano Carlos de los Cobos decidiera no renovar su contrato, después de quedar fuera de las eliminatorias de la CONCACAF rumbo al Mundial de Sudáfrica 2010.
Por esta razón, la convocatoria mantuvo la base de los que terminaron jugando con el estratega azteca en 2009.
En aquella ocasión, la selección viajó con 18 jugadores en la nómina oficial; los porteros Miguel Montes y Dagoberto Portillo; los defensas Deris Ariel Umanzor, Alexander Escobar, Marvin González, Manuel Salazar, Ramón Flores, Mardoqueo Henríquez y Alfredo Pacheco; los volantes Ramón Sánchez, Osael Romero, Arturo Álvarez, Juan Carlos Moscoso, Dennis Alas, Josué Odir Flores, Shawn Martin y Andrés Flores; y Rudis Corrales de delantero.
Según declaró Jay Prakash, ex ayudante de Wilson Raj Perumal, él debía entregar $75 mil a los jugadores salvadoreños para amañar el partido contra Estados Unidos.
Prakash siempre ha negado la comisión de aquel soborno. Prakash fue reconocido por seleccionados de Zimbabwe en el marco de un amaño contra Tailandia en 2009. En aquella ocasión, Raj Perumal se sentó en el banquillo de la selección de Zimbabwe para coordinar los hechos que les favorecerían en las apuestas en vivo.
LA COMUNICACIÓN
El patrón advertido en ese juego que Zimbabwe perdió 3-0 ante Tailandia en diciembre de 2009 se asemeja a los que los testigos le dijeron a FIFA sobre el encuentro de Tampa de 2010.
Según los testimonios, Marvin González les había comentado que se reunirían media hora antes del partido para ultimar las instrucciones sobre cuál sería el resultado final.
Los apostadores les dirían entre qué minutos debían caer los goles, aunque les adelantó que por lo general eran entre los 70 y 90 minutos del partido. Sin embargo, si las cosas no se daban como los apostadores decían, les adelantó que tenían que regresar el dinero.
Los goles de Estados Unidos cayeron en los minutos 74 y 89 de aquel encuentro.
“Marvin González les comentó también que en algunas ocasiones se daban instrucciones por teléfono a alguien que se sienta en el banquillo para que este se las transmita a los jugadores involucrados en el plan”, se lee en el informe.
La transcripción de los testimonios coincide con la lógica de otro testimonio, también de un seleccionado salvadoreño que participó en ese encuentro, brindada a ESPN en 2012.
Basada en esa confesión bajo reserva de identidad, consignada en un especial del programa E:60, la cadena internacional afirmó: “uno de esos futbolistas comentó a ESPN que él y algunos de sus compañeros recibieron un cheque de un banco de Singapur y junto a él recibieron instrucciones precisas sobre lo que debían hacer en el encuentro en Tampa”.
Uno de los testigos entrevistados por FIFA dijo que el plan sí se concretó y que hubo un momento en el que Marvin González le reclamó a Dennis Alas porque estuvo a punto de hacer un segundo gol.
Dennis Alas entró de cambio en ese partido por Osael Romero (a los 71 minutos). La segunda sustitución fue la de Josué Odir Flores por Ramón Flores (a los 81’), ambos en el segundo tiempo del duelo.
Consultado ayer, Alas negó que González le haya dicho cosa alguna durante el encuentro.
MARVIN GONZÁLEZ MENCIONÓ A HENRÍQUEZ
Según consignó Grupo Dutriz en las notas publicadas previo al partido, Mardoqueo Henríquez no se entrenó con el resto de los jugadores en la semana previa al viaje y fue descartado para el encuentro amistoso 24 horas antes, ya en suelo estadounidense, por una lesión.
Sin embargo, los jugadores que atestiguaron ante los personeros de FIFA entendieron que Mardoqueo Henríquez era parte del plan, y que recibiría $9 mil dólares, según se los aseguró el mismo Marvin González.
El 5 de julio de 2011, Mardoqueo Henríquez fue señalado por el colombiano Víctor Alemán, ex vicepresidente del FAS, como “contacto de un tal Armando para arreglar partidos en la selección y en los equipos”.
Alemán fue expuesto en una grabación, hablando de amaños patrocinados por gente de Singapur con Víctor Velásquez, ex jugador del FAS, en una grabación presentada por Mardoqueo Henríquez como descargo de los dichos en su contra.
Alemán nunca quiso aclarar, pese a la pregunta expresa de El Gráfico, si por “Armando” se refería al ex futbolista nicaragüense salvadoreño Armando Collado, quien ha sido identificado como uno de los reclutadores del amaño más activos de la región, con nexos con la mafia singapurense, empleado de Wilson Raj Perumal y luego asociado a otro amañador, el también asiático Santia Raj.
Los dos testigos dijeron a FIFA haber visto en dos oportunidades a Armando Collado, en el marco del partido contra Estados Unidos en Tampa Bay.
“La primera vez que lo vieron fue en el partido y la segunda, cuando la delegación iba de regreso a El Salvador, ya que estuvo en el mismo vuelo”, reza el informe de los testimonios.
Los jugadores agregaron que “Collado hasta estuvo sentado en el banquillo”. Esto no ha podido comprobarse, pese a que la redacción de El Gráfico ha revisado varias veces el vídeo del juego.
REFUTAN LA HISTORIA
Tanto Marvin González como Mardoqueo Henríquez negaron las acusaciones y expresaron que son rumores que no se concretan con pruebas.“Si los jugadores que hablaron tienen pruebas, que las presenten, porque si no los demandaré”, expresó Marvin González. “Ya estoy harto de tanto chambre sin tener pruebas. Si el periódico tampoco presenta pruebas, también lo demandaré. Y si FIFA dice que tiene ese informe, también debe presentar las pruebas”, concluyó.
Henríquez aseguró que todo se trata de una campaña en su contra. “Estuviera encantado de recibir esa cantidad de dinero así nomás. Es más, haciendo memoria, yo ni jugué ese partido por lesión. No entiendo. Quieren manchar mi carrera y me sorprende”, afirmó.
De entre los que conformaron el apartamento defensivo, El Gráfico habló con Alexander Escobar y Manuel Salazar.
“Los periodistas sólo lanzan nombres sin tener pruebas y le minan el cerebro a los jugadores”, declaró Escobar.
Manuel Salazar sostuvo que no vio ni escuchó nada raro.