El argentino Gerardo Martino, actual seleccionador de fútbol de Argentina, admitió que no analizó a fondo su fichaje por el Barcelona y que eso pudo influir en su fracaso al frente del equipo la pasada temporada.
«Está a la vista que lo que no analizo, seguramente no me sale bien», dijo el técnico en una entrevista con la agencia dpa en Buenos Aires.
En la entrevista Martino habló sobre varios temas, algunos incómodos, como su relación con Xavi Hernández, la evolución futbolística de Lionel Messide cara al Mundial de Rusia 2018 y la influencia de la «Pulga» en el Barcelona, donde considera que «todos terminan esperando» que el crack «resuelva» los partidos.
Le pasó todo muy rápido en los últimos años… Sí, muy rápido.
Llegó al Barcelona y a la selección con un listón muy alto por las etapas anteriores en ambos lados. Guardiola le dijo hace unos meses que si llama el Barcelona, hay que ir corriendo. Con la selección argentina debe ser parecido, ¿no? Sí, pero cuando empecé a charlar el tema de la selección argentina me parecí más a mí. Cuando fui por el tema del Barcelona no me parecí tanto a mí. Esa es la diferencia. No hay que salir corriendo, no lo comparto. En mí suele ser un error. Acá no vine corriendo. Y en el otro… no digo que fui corriendo pero no lo analicé de la manera que se debe analizar un trabajo. Newell’s, que para mí es mi lugar, mereció un análisis prolongado, no fui corriendo. Para mí está a la vista que lo que no analizo seguramente no me sale bien.
¿Está arrepentido? No, no, no… Eh, o sea, un poco, contestaba respecto de salir corriendo, un hecho que creo que habla más de improvisación que de seriedad.
A Messi lo conoce bastante, ¿cómo cree que será su evolución de cara al Mundial de Rusia 2018, cuando tendrá 31 años? ¿Se lo imagina menos explosivo, jugando más retrasado y como asistidor? Es medio impredecible, como él es como futbolista. Es muy difícil establecer con qué nos vamos a encontrar. Uno puede pensar que con el paso del tiempo va a jugar un poco más atrás y sin tanta explosión, y ya lo ha hecho. O podés imaginarlo tirado a un costado, teniendo más posibilidades de jugar uno contra uno. También lo ha hecho. Todo lo que pase alrededor de Leonel pasa pura y exclusivamente por cómo se encuentre él. Una cosa muy importante es el desgaste que viene teniendo desde hace diez años, con un promedio 60 o 65 partidos por año. Juega mucha cantidad y partidos decisivos que te agotan física y psicológicamente.
Y ocupa un rol central en sus equipos. Sí, él tiene una carga extra que no tiene ninguno. Todo el mundo está esperando que él te resuelva los partidos, algo que es muy poco modificable. Al tratarse de él, todos esperan que resuelva. Los entrenadores tenemos que tratar de que pueda encontrar las condiciones en el juego para ser la parte más importante del equipo, pero no siempre el salvador.
¿Esto es igual en el Barcelona y en la selección? Si yo te tuviera que contestar, creo que hay más espera de parte de los compañeros del Barcelona que de los de la selección. Siempre se dijo que en el Barcelona le iba mejor por los compañeros que tenía. La realidad es que también en Barcelona todos terminan esperando que él resuelva muchas cosas. No dista mucho su situación de la selección con la del Barcelona. Terminan todos esperando que él resuelva la mayor parte de las cuestiones que se van dando en un partido.
Su paso como entrenador del Barcelona fue difícil, ¿no? Sí, difícil.
¿Qué cosas lo decepcionaron al ver de cerca al Barcelona? No diría que me decepcionaron. Las épocas han sido distintas. La mejor expresión del Barcelona es muy difícil de sostener y la ha sostenido mucho tiempo. Casi toda la época de Guardiola ha sido de lo mejor que me ha tocado ver. Llegar después de eso es difícil de sostener y de igualar. Cualquier comparación siempre empezás desde muy atrás. Ha sido bastante difícil competir con eso. En definitiva pasa también hoy: se compite siempre con aquel Barcelona y probablemente esto se siga repitiendo. Es muy difícil que la gente no tenga en su retina algo que maravilló al mundo.