La FIFA rechazó los estatutos presentados por la Federación Nacional de Fútbol de Guatemala, suspendida desde hace más de un año, y le advirtió que las sanciones pueden aumentar si antes del 30 de abril no aprueba el reglamento propuesto por una comisión normalizadora.
En una carta firmada este miércoles en Zúrich y divulgada por medios locales, la FIFA le recuerda a la Federación guatemalteca que la suspensión impuesta el 26 de octubre de 2016 seguirá vigente hasta que la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala apruebe los primeros estatutos, avalados por una comisión normalizadora impuesta por la FIFA tras un caso de corrupción.
Si la Confederación no aprueba este reglamento, con fecha del 25 de julio de 2017, la FIFA y la Confederación Norte, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf) «podrán establecer sanciones adicionales» a la Federación guatemalteca, a cuya directiva no reconocen.
La Confederación ha argumentado que el reglamento propuesto por la FIFA entra en conflicto con leyes nacionales.
El Comité Ejecutivo de la Federación Nacional guatemalteca, electo en noviembre después de que la FIFA retirara a la comisión normalizadora impuesta desde 2015 por no lograr la aprobación de los estatutos que proponían, envió el 16 de febrero el nuevo reglamento al ente rector mundial.
Esa disposición supuestamente cumplía con todos los preceptos, pero a juicio de la FIFA son los estatutos de julio de 2017 los que están «alineados con los requisitos» internacionales y no los entregados, pues las «modificaciones» no dan las condiciones necesarias para levantar la suspensión.
En cuánto ese reglamento se apruebe por parte de la Confederación y existan «condiciones para organizar elecciones basadas en los preceptos» que ahí se establecen, se llevará a cabo una misión de la FIFA y la Concacaf para «evaluar la situación de Guatemala y analizar los pasos a seguir».
En la misiva, la FIFA recuerda que no reconoce a la dirección actual de la Federación, por ser electa sin la aprobación de esas reglas que considera básicas, y que cualquier comunicación entre los entes no significa un reconocimiento.
Con esta decisión, Guatemala pierde la posibilidad de disputar la Copa Centroamericana, un torneo clasificatorio para la Copa Oro que incluye a todas las selecciones de la región y del norte de América.
La suspensión establece, por un lado, que ni las selecciones nacionales ni los clubes tienen derecho a participar en ninguna competición internacional hasta que finalice la suspensión y, por otro, que no pueden beneficiarse de ningún programa de desarrollo, curso o formación auspiciados por el ente deportivo internacional.
El resto de federaciones tampoco pueden mantener contactos de carácter deportivo con la de Guatemala, según el artículo 16, apartado 3, mientras esté vigente la suspensión.