El alemán Marcel Kittel logró hoy en la duodécima etapa una ajustada victoria al ‘sprint’ ante el británico Mark Cavendish, su tercer triunfo en el presente Tour de Francia, en el que Chris Froome mantuvo el maillot amarillo de líder.
El ciclista del Argos fue un poco más fuerte que el del Omega en una cerrada llegada y demuestra que es el mejor llegador del Tour centésimo.
A sus 25 años, el ‘sprinter’ de Arnstadt eleva a cinco el número de victorias germanas en la ronda gala y evita que Cavendish sume la vigésima quinta de su carrera.
Los dos ciclistas se jugaron, mano a mano, un ‘sprint’ muy cerrado en el que el alemán fue un poco más fuerte. Cavendish partió bien, llevado por su lanzador Gert Steegmans, pero en los últimos metros se vio superado por la potencia de Kittel.
Por detrás de ellos, muy lejos de poder disputar la victoria de etapa, entró el eslovaco Peter Sagan (Cannondale), portador del maillot verde de líder de la clasificación de la regularidad.
Faltó a la cita con el ‘sprint’ el alemán André Greipel (Lotto), que se quedó cortado en una caída que se produjo a poco más de dos kilómetros para el final y no pudo colocarse para la llegada.
Kittel, que el año pasado abandonó enfermo el Tour, muestra su fortaleza en una carrera que en los últimos años había estado dominada por Cavendish.
Su victoria en la primera etapa de Bastia le permitió ser, además, el primer maillot amarillo del centésimo Tour. En Saint-Malo logró el segundo triunfo hace dos días.
Con su tercer triunfo, el ‘sprinter’ alemán demuestra que es el más potente y lo hace ante las barbas del ciclista en activo que más victorias de etapa suma en el Tour, Cavendish, que está a 10 del récord absoluto de Eddy Merckx.
La etapa, 218 kilómetros entre Fougueres y Tours, estuvo marcada por una larga escapada protagonizada por cinco corredores, entre ellos el correoso español Juan Antonio Flecha (Vacansoleil), acompañado de los italianos Francesco Gavazzi (Astana) y Manuele Mori (Lampre), y los franceses Anthony Delaplace (Sojasun) y Romain Sicard (Euskaltel).
Saltaron al poco de comenzar la jornada y llegaron a tener casi 9 minutos de renta. Pero era una fuga controlada por los cronómetros de los equipos de los ‘sprinters’, que no tenían intención de dejar escapar una etapa totalmente llana.
Flecha, que ya ha sumado dos triunfos en el Tour, fue el más persistente, el que más esfuerzo le puso a la fuga y el último en rendirse a la evidencia de un paquete que aceleró para acabar con la aventura.
Hasta que fue absorbido a falta de 3 kilómetros para el final y eso fue el banderazo de salida para que Argos, por un lado, y Omega, por otro comenzaran a situar a sus campeones.
En ese momento se produjo la caída que cortó a Greipel y que dejó adelante un pequeño grupo que se iba a jugar la victoria final, con Cavendish como máximo favorito.
Pero Kittel le robó la cartera en el último suspiro en una metáfora del traspaso de poderes que parece estar siendo este Tour de Francia en los ‘sprint’.
