Keylor Navas tiene el deseo de continuar en el Madrid. Su voluntad es la misma que el verano pasado cuando desde la directiva se afanaban en la contratación de un De Gea que no llegó por minutos y las noticias sobre un nuevo interés en el meta español no van a cambiar su punto de vista. El tico se sobrepuso a aquel golpe y su mentalidad sigue siendo la misma: seguir en el Madrid. Eso sí, el guardameta aspira a mejorar su salario hasta los 4,4 millones netos.
La cantidad no es capricho. Es el equivalente que hubiera percibido en el Manchester United de haberse consumado su salida en aquel intercambio con De Gea. Ahora cobra la mitad y espera que sus actuaciones hayan convencido a los que hace menos de un año quisieron mandarle a Inglaterra. Aún así, el siempre mantiene la calma. “Lo mío es trabajar para que lleguen las cosas”, repite Keylor cuando le preguntan por su renovación. Ahora sólo se centra en la final de Milán. Quiere levantar la Champions, una competición en la que sólo ha recibido dos goles.
La realidad es que Keylor sostuvo al Madrid con sus paradas cuando más lo necesitó el equipo. Ha jugado 44 partidos y ha salido imbatido en 22 ocasiones. Ha recibido 30 goles en una temporada para enmarcar y ha terminado con una media de 0,68 goles encajados por partido. Unas cifras que Casillas sólo consiguió mejorar en la temporada 2014-15, cuando era titular en Champions y Copa y suplente en la Liga, con un promedio de 0,50. La mejor marca del de Móstoles jugando todo fue 0,74 goles por partido en la 2010-11. De Gea esta temporada ha encajado 0,97 goles por partido.
