James Rodríguez tiene al madridismo en el bolsillo. El 22 de julio de 2014 fichó por el Real Madrid por 80 millones de euros tras un Mundial con Colombia espectacular y 404 días después ha demostrado que la inversión ha sido todo un acierto. En sólo 48 partidos con la camiseta blanca, el colombiano lleva 19 goles y 19 asistencias en todas las competiciones. Anoche, ante el Betis, volvió a hacer un partido redondo en su vuelta al once: un golazo de falta directa y otro de chilena que encarrilaron el 5-0.
La temporada pasada ya fue fijo e indiscutible para Ancelotti. De ahí que su suplencia la semana pasada en Gijón pusiera en el disparadero a Benítez. En la 2014-15 James jugó 3.503 minutos distribuidos en 46 partidos 8sólo fue suplente en tres encuentros). Su primer gol llegó en la Supercopa de España ante el Atlético. Su primera asistencia la dio en Riazor en la goleada 2-8 al Deportivo. Desde entonces, el delantero hizo 13 goles más en Liga, uno en Champions y dos en Copa. Casi todos, golazos de bandera.
Siendo excelentes sus números, aún pudieron ser mejores. En primer lugar si lanzara las faltas directas (ha demostrado más efectividad que nadie en el Madrid) e incluso los penaltis, como con su selección, pero Cristiano y Bale, salvo contadas excepciones, están por delante. Y luego también pudo mejorar sus registros si su racha no se hubiera cortado por dos lesiones. Se ausentó hasta en 11 partidos por unos problemas musculares y por la fractura de un hueso del pie y, además, por la acumulación de tarjetas amarillas (baja en el encuentro ante el Eibar en el Bernabéu).
Ante el Betis hizo su segundo doblete con el Real Madrid. El otro lo consiguió frente al Cornellà en otro 5-0, esta vez en la pasada edición de la Copa del Rey. Por cierto, según datos aportados por Míster Chip, los dos últimos goles de falta del Real Madrid en Liga son de James. Al margen de Cristiano Ronaldo, no lo lograba nadie desde 2009.
