La Juventus quiere soñar con una hazaña legendaria de la remontada y, sin el sancionado Dybala, muchas de las esperanzas bianconere pasan por los pies de Gonzalo Higuaín. El argentino tomará el mando del ataque en la que será su primera noche en el Bernabéu tras el adiós del año 2013. Después de marcar 121 goles en 264 partidos con los blancos, el Pipita, cansado del dualismo con Benzema, decidió que era el momento para dar el paso en un club donde fuera protagonista absoluto. Apostó por el Nápoles de Benítez. Fue traspaso por 40 millones y dejó en su paso por el Bernabéu una curiosa estadística: sólo marcó 8 goles en 48 partidos de Champions.
De azzurro vivió tres intensas temporadas, culminadas con el histórico récord de 36 dianas en un campeonato de la Serie A tras la llegada de Sarri al banquillo. Tras aquella proeza el punta pasó a la Juventus, dejando 90 millones en las arcas de De Laurentiis y ganándose la rabia de sus extifosi, que vivieron el adiós como una traición. De bianconero siguió marcando goles, manteniendo una gran media: lleva 54 dianas en 97 partidos, diez de las cuales han sido en la Champions League.Higuaín ha demostrado haberse desbloqueado en Europa, donde apenas marcó 8 tantos en sus seis temporadas y media madridistas, y mañana tendrá la oportunidad de mostrarle su nueva cara al que fue su público. En la ida luchó con orgullo y sólo dos paradones de Keylor Navas le negaron el gol. Era la segunda vez que se cruzaba con el Madrid tras haberle dejado en 2013. La primera fue en la final de Champions en Cardiff. Estuvo desafortunado. Ahora regresa al Bernabéu esperando que, por fin, a la tercera sea la vencida.
