Alejandro Sabella pisará el césped del estadio Mateo Flores con dos búsquedas en mente: la primera, a un año del Mundial (363 días, con precisión), el entrenador quiere ir delineando lo que le falta de la lista de buena fe ante la inminencia de la clasificación. La segunda, el hombre busca también consolidar una idea de juego que le permita incluir a ese poker ofensivo que genera envidia universal (Messi, Di María, Agüero e Higuaín). Cita hoy el Diario el Clarín. La cita será desde las 8 de la noche 23 horas de Argentina, frente a Guatemala, que ya tiene la incómoda certeza de que no estará en Brasil el año que viene y que ocupa el puesto número 88 en el ranking de la FIFA, justo detrás de El Salvador y de Emiratos Arabes Unidos.
Pero más allá de las posibilidades y del pasado de este seleccionado (que nunca accedió a una Copa del Mundo), el fútbol late en esta tierra. Por eso, la ansiedad en las calles y el entusiasmo que genera la presencia de Lionel Messi, crack universal, figura que aglutina en cada rincón en el que se presente.
Esta noche, el seleccionado argentino -según cuentan los medios locales- provocará una historia en el deporte guatemalteco con su sola presencia. Messi es omnipresente. Aparece en cada tapa de diarios y de revistas, se lo anuncia y se lo reproduce como imagen en los canales de televisión, de él se habla en las calles. Aún no se sabe si será titular, pero él -casi sin querer- ya está jugando.
En las afueras del hotel, allí sobre la ruta que conduce al vecino El Salvador, lo esperaban hinchas. Hay mucha custodia y los futbolistas eligen mantenerse recluidos. Los únicos contactos con el exterior del hotel fueron el reconocimiento del estadio, en la noche del miércoles, y la práctica de ayer.
Aunque ambos seleccionados llegan de sendos empates. Por supuesto no están parados en el mismo lugar: mientras la Argentina empató 1-1 frente a Ecuador en la altura de Quito y se encamina hacia el Mundial de modo inexorable. Mientras tanto, Guataemala no pudo frente al débil seleccionado de Belice, con el que empató sin goles y sin fútbol hace tres días.
