Fernando Gaviria, corredor del Quick-Step Floors, se convirtió en el segundo ciclista colombiano de la historia que se viste con el maillot amarillo en el Tour de Francia, al imponerse en el sprint de la primera etapa de la 105 edición, que concluyó en Fontenay-le-Comte.
Gaviria superó a Peter Sagan (Bora – Hansgrohe) y Marcel Kittel (Katusha – Alpecin) en remate electrizante no sólo por la disputa de la llegada; también por sacar una ventaja en el tiempo general como Chris Froome (Team Sky), Richie Porte (BMC Racing Team) o Nairo Quintana (Movistar Team) quienes empezaron con pie izquierdo tras rezagarse por distintos motivos.
No menos de 176 corredores tomaron la salida desde Noirmoutier-en-Île. Nada más bajarse la bandera que indica el recorrido neutralizado, Jérôme Cousin (Direct Energie) lanzó un demarraje que fue seguido rápidamente por Yoann Offredo (Wanty – Groupe Gobert) y el local Kévin Ledanois (Fortuneo – Samsic), que pasaba por su pueblo durante la etapa de este sábado. Ese primer ataque fue el bueno: el trío había acumulado una ventaja de 2:45 minutos ya en el kilómetro 9 que alcanzó los 4:00 minutos, sobre el kilómetro 25. El trabajo de integrantes de Quick Step Floors, Team Dimension Data, Groupama-FDJ y LottoNL-Jumbo la estabilizaron posteriormente en torno a los 3 minutos para después reducirla paulatinamente hasta la neutralización.
A 10 kilómetros de meta, la etapa comenzó de nuevo. Una caída de Arnaud Démare (Groupama-FDJ) desataba los nervios en el pelotón. Después llegaba el turno del joven delfín de Team Sky, Egan Bernal; inmediatamente después caía el líder del conjunto británico y cuatro veces ganador del Tour de Francia, Chris Froome, quien se encontraba relegado en un grupo descolgado junto a Richie Porte (BMC Racing Team) y Adam Yates (Mitchelton-Scott). No fueron los únicos favoritos para la general que se vieron en aprietos: a sólo 4 kilómetros de meta, Nairo Quintana (Movistar Team) pinchó. A todos ellos les cayó alrededor de un minuto de pérdida en la general.