LISBOA (AP) — Emmanuel Macron se apuró en sacar provecho del inesperado paso triunfal de Francia en la Liga de Campeones para rédito político.
“¡En Bruselas, como en las canchas, Francia y Alemania son los motores de Europa!”
Las voces más determinantes dentro de la Unión Europea. Y los dos países que siguen de pie en la máxima competición de clubes en el continente.
Nunca se había visto: dos equipos de Francia en las semifinales de la Liga de Campeones tras dos noches de resultados asombrosos en Lisboa. Es apenas la segunda vez — tras 1991 — desde que la Copa de Europa empezó a disputarse en 1955 que no hay presencia de equipos de Inglaterra, Italia o España entre los cuatro últimos.
Lionel Messi y su Barcelona empacaron maletas tras ser triturados 8-2 por el Bayern Múnich el viernes. Lyon, el equipo de menor jerarquía en los cuartos de final, noqueó el sábado al Manchester City, el plantel más caro del mundo.
Para impedirle al Lyon alcanzar su primera final de la Copa de Europa, el séptimo de una liga francesa que fue suspendida por la pandemia se las verá el miércoles con un Bayern que va por un sexto título continental.
Una noche antes, el Paris Saint-Germain, que frenó la admirable marcha del Atalanta, chocará con un Leipzig que fue fundado hace 11 años y por primera vez se asomó en rondas de eliminación directa.
Habría que remontarse mucho más atrás para identificar una semifinal de la Champions sin Messi o Cristiano Ronaldo entre los actores. No se daba desde 2005.
Cristiano, campeón europeo con Manchester United y Real Madrid, ni siquiera pudo aterrizar en la capital de Portugual donde puso en marcha su carrera en el Sporting. Juventus fue eliminado en octavos por un Lyon que hizo caso omiso de su decepcionante campaña doméstica para subyugar al conjunto que se ha apropiado de los últimos nueve títulos de la Serie A.
Sería el reflejo de un resurgimiento del Lyon, que monopolizó el título de la liga francesa entre 2002 y 2008 hasta el despunte del PSG, espoleado por la inversión de 1.000 millones de dólares en fichajes por parte de sus dueños de Qatar desde 2011. Siete de los últimos ocho títulos domésticos han sido conquistados por el PSG.
Pero Kylian Mbappé quedó fascinado con que el Lyon se entreveró en la élite. El goleador del PSG se mofó de los detractores de la Ligue 1, reivindicando el nivel y estatus de la misma.
“LIGA DE GRANJEROS”, tuiteó Mbappé, acompañando su mensaje con los emoticonos de un payaso y aplausos, mencionando la cuenta del Lyon en Twitter tras la victoria 3-1 ante el City.
Con Pep Guardiola — dos veces consagrado en la Champions como técnico del Barcelona — superado tácticamente por Rudi García del Lyon, no quedan más técnicos de fuste en este minitorneo.
Diego Simeone, quien perdió dos finales de la Champions con el Madrid, claudicó ante Leipzig el miércoles. En la fase de octavos, Julian Nagelsmann también le ganó el duelo al Tottenham de José Mourinho, finalistas el año pasado. En la misma etapa, la defensa del título de Jürgen Klopp con Liverpool se disipó ante el Atlético. El objetivo de Zinedine Zidane de un cuarto título fue desmontado por el City de Guardiola en octavos.
Todo esto garantiza que un técnico alzará por primera vez la Copa Europa el próximo domingo. Y en una rareza del fútbol actual, los técnicos en las semifinales son todos oriundos de los países representados por los equipos en carrera.
Tres de lo cuatro son alemanes: Hansi Flick (Bayern), Thomas Tuchel (PSG) y Nagelsmann.
“Es obvio que este es un momento muy bonito para el fútbol alemán”, dijo Nagelsmann. “La formación de técnicos en Alemania es excelente. Yo tuve un buen aprendizaje y todo lo que he seguido absorbiendo en mi carrera”.
Nagelsmann tomó sus primeras lecciones en los banquillos bajo Tuchel, con quien trabajó en el Augsburgo antes de clasificara al Hoffenheim a su primera Champions.
“Siempre recuerdo que se hablaba de que el fútbol alemán se rezagaría en el plano internacional por tener primordialmente entrenadores alemanes”, dijo Nagelsmann, quien con 33 años de edad sería el timonel más joven en alzarse con el título. “Y ahora todo es fenomenal. Desde luego que tampoco es así. Pero no podemos vivir en los extremos”.”
La paralización del fútbol por el coronavirus acabó favoreciendo a Francia y Alemania. Las ligas de Inglaterra, Italia y España recién se reanudaron en junio y se completaron a fines de julio o comienzos de agosto.
No sorprendió que los jugadores de los clubes de Francia y Alemania estuvieran más frescos de piernas.
La Bundesliga se completó a fines de junio. La Ligue 1 bajó el telón tras disputar sus últimos partidos en marzo, al decretarse las cuarentenas en Europa por el COVID-19. La única actividad oficial en Francia fueron dos finales de copas domésticas en julio, con el Lyon cayendo por penales ante PSG en la Copa de la Liga.
“La cabeza responde a las piernas. Esto no impidió que algunos de mis jugadores quedasen exhaustos”, dijo García tras la victoria de su Lyon ante el City. “Pero solemos recuperarnos mejor cuando ganamos, y esta ha sido una victoria enorme para nosotros y el fútbol francés”.
