Es oportuno que el Super Bowl ponga fin a más de una sequía en su visita a Miami.
Los Chiefs de Kansas City estarán en el juego por primera ocasión en 50 años y se enfrentarán a los 49ers de San Francisco, que tienen la oportunidad de ganar su primer título de la NFL en 25 años. Y el partido regresa a Miami por primera vez en una década, atraído luego de una remodelación del estadio que tuvo un costo de más de 550 millones de dólares.
El grupo The Who no reconocería el estadio. Ellos actuaron en el espectáculo del medio tiempo la última vez que el Super Bowl se celebró en Miami, en 2010 para ser exactos.
Ahora, el juego regresa por 11ra ocasión, la mayor cantidad para cualquier ciudad, mientras la NFL concluye su temporada número 100 el 2 de febrero.
“Estamos encantados de estar de regreso en Miami”, comentó Peter O’Reilly, vicepresidente ejecutivo de los eventos y desarrollo comercial de la liga. “Se siente como la manera correcta para terminar esta 100ma temporada, porque hemos tenido juegos muy buenos aquí”.
Miami es el sitio donde Vince Lombardi ganó su último título de la NFL en el segundo Super Bowl de la historia, donde Joe Namath cumplió su garantía, y el escenario en el que Peyton Manning y Drew Brees conquistaron sus primeros anillos de campeonato.
Pero el estadio de los Dolphins, que abrió sus puertas en 1987, necesitaba una remodelación significativa para continuar formando parte del sistema de rotación del Super Bowl. El propietario del equipo, Stephen Ross, y que también es dueño del inmueble, gastó dinero de su bolsillo en la renovación de varios años.
“El Super Bowl no estaría aquí si no hubiera sido por la enorme inversión privada de los Dolphins”, dijo Rolando Aedo, ejecutivo de la Greater Miami Convention and Visitors Bureau.
Diez años entre ediciones de Super Bowl igualaron la racha de ese tipo más larga para Miami.
“Fue doloroso”, comentó Rodney Barreto, presidente del Super Bowl Host Committee de Miami. “Pero todo el crédito es para Stephen Ross, quien firmó el gran cheque para modernizar el estadio”.
Las mejoras incluyeron nuevos asientos, palcos, concesiones, baños, puentes y túneles para transeúntes y un toldo para proteger a los asistentes del sol y la lluvia.
Árboles y plazas nuevas transformaron el terreno a algo más que un estacionamiento y ahora el complejo alberga el torneo de tenis Masters de Miami. El estadio se encuentra en el suburbio de Miami Gardens y también es anfitrión del juego por el Campeonato Nacional del fútbol colegial, de juegos de los Hurricanes de Miami, de partidos de fútbol internacionales y conciertos.
“Podría ser el único lugar en el mundo donde puedes ver a Patrick Mahomes, Serena Williams, Lionel Messi y Jay-Z, todos en el mismo lugar”, señaló Tom Garfinkel, presidente y director general de los Dolphins.
Si bien que el estadio luce bastante diferente a como era hace 10 años, cuando Brees y los Saints vencieron a Manning y a los Colts en el juego por el título de la NFL, el Super Bowl también a cambiado.