Paulo Dybala tenía ante sí una oportunidad única. Frente su público y contra el actual campeón de Europa, el delantero argentino era la gran apuesta para hacer daño al Real Madrid pero su actuación estuvo lejos de ser determinante, todo lo contrario.
El Real Madrid se paseó en Turín con un doblete espectacular de Cristiano Ronaldo y Dybala volvió a quedar señalado, seguramente el que más de la ‘Vecchia Signora’. Pese a que aportó algo de peligro en el primer tramo del partido, él mismo se encargó de disiparse con el pase de los minutos y acabó siendo expulsado tras ver doble amarilla.
Dybala comenzó bien, asumiendo el peso ofensivo, jugando entre líneas y ofreciéndose, incluso después del primero de Cristiano. Pero su actuación no fue mucho más allá. Al borde del descanso fue amonestado por tirarse dentro del área en busca del penalti, pero no logró engañar al árbitro.
Tras el descanso apenas se le vio. Cristiano hizo una obra de arte en el segundo gol blanco y solo dos minutos después llegó la jugada que le ha puesto en el punto de mira de todos los críticos. Balón dividido al que llega antes Carvajal y patada en el pecho de Dybala. Amarilla -como poco- clarísima y expulsión para el argentino con más de media hora de juego por delante, dejando a su equipo con diez ante un Real Madrid que entraba como un puñal a cada contraataque.
Dyabala volvió a deber en un día grande y, pese a sus buenas actuaciones en las últimas jornadas de la Serie A, muchos le echan a cara que se ‘borrara’ del partido más importante de año en la Juventus, algo que también puede pesar, y mucho, a la hora de que Sampaoli decida si se lo lleva o no al Mundial de Rusia.