Los 20 atletas que conforman la delegación deportiva guatemalteca presente en Nanjing, China, con motivo de los II Juegos Olímpicos de la Juventud, viven desde el martes una experiencia única de convivencia y emoción incomparable.
Distribuidos en 8 apartamentos (con 34 camas en total) Guatemala ocupa parte del séptimo nivel del edificio B de la Villa Olímpica, la cual acoge en total a más de seis mil atletas, entrenadores y oficiales de 204 países.
En cada rincón de esta majestuosa construcción, se vive un ambiente de fraternidad y alegría, que contagia y une en un mismo sentimiento a los atletas y voluntarios.
Juan Miguel Rosales, jugador de baloncesto 3×3, y Mary Burge, de ciclismo, apresuran el paso en busca del lugar donde se desarrollará un taller de cocina oriental, dirigido por una especialista en nutrición.
Minutos más tarde se unirían sus compañeros, Regina Romero, de tiro con arco, José Tuchán y Anthony Guerra, de baloncesto, además de la joven embajadora, Gabriela Matus.
En su tiempo libre los atletas asisten a los diversos talleres de aprendizaje y actividades recreativas que se desarrollan dentro de la Villa y bajo la supervisión de colaboradores y voluntarios de los Juegos.
A pesar de ello, los deportistas nacionales para nada descuidan su meticulosa preparación con vistas a su participación en los eventos deportivos. Por caso el exigente entreno que realizaron la tarde del jueves en los alrededores de la Villa, Isabel Brand y Wilhelm Picón, exponentes de pentatlón moderno.
Cae la noche en la Villa y el show de luces en los enorme edificios que integran el complejo habitacional, brillan por todo lo alto.
