Cristiano se encuentra en la fase final de la recuperación del esguince de rodilla que sufrió en la final de la Eurocopa (10 de julio). Pero a pesar de su mejoría no va a arriesgar y será baja el sábado ante el Celta. El portugués ha fijado su debut en La Liga para el próximo 10 de septiembre. Ese día el Madrid recibirá en el Santiago Bernabéu a Osasuna.
Desde que Cristiano se reincorporó a los entrenamientos con el Madrid tras proclamarse campeón de la Eurocopa y disfrutar de 30 días de vacaciones, su evolución ha sido progresiva. Hace unos días ya comenzó a trabajar con el balón y ayer las imágenes ofrecidas por el Madrid en su web ya mostraron a Cristiano realizando ejercicios sobre el campo.
No obstante, todavía le faltan unas cuantas sesiones de entrenamiento para que pueda empezar a participar en los partidillos con el resto de compañeros. Así que el parón de selecciones que habrá tras la jornada liguera del próximo fin de semana le servirá a Cristiano para terminar su recuperación y tomar el tono físico suficiente para afrontar el encuentro ante Osasuna en buenas condiciones.
Cristiano viajará a Mónaco con motivo de la entrega del Premio a Mejor Jugador del Año para la UEFA. Los títulos de campeón de Europa con el Madrid y de la Eurocopa con Portugal le sitúan como el gran favorito para alzarse con el galardón. Los otros dos finalistas son Bale y Griezmann.
El propio Cristiano ha reconocido en declaraciones a la revista World Soccer que esta nominación “es el signo de que hice una gran temporada. Por títulos, probablemente la mejor. Ha sido un año extraordinario”.
El crack señala una vez más cuál fue el punto de inflexión para que el Madrid acabase ganando la Undécima: “No hicimos un buen arranque, pero todo cambió con la llegada de Zidane. Muchas de las cosas del equipo mejoraron con él”.
