A la una de la tarde Cristiano Ronaldo abandonaba los juzgados de Pozuelo de Alarcón (Madrid) tras una hora y media de declaración ante la jueza en el marco de la investigación por un presunto delito de fraude fiscal del jugador portugués.
El jugador del Real Madrid entró y salió a las dependencias judiciales por el garaje de los juzgados, evitando así la presencia de las decenas de periodistas que cubren su comparecencia a la puerta de los juzgados.
El jugador tenía previsto leer un comunicado ante los medios para defender su inocencia. De hecho, durante la mañana se instaló un atril en la puerta de los juzgados y se preparó un equipo de megafonía para la comparecencia del portugués. Hasta el lugar se habían acercado más de 200 periodistas de distintos países y se concentraban más de 40 cámaras en una plataforma colocada para la ocasión.
Pero finalmente salió ante los medios Iñaki Torres, jefe de comunicación de Gestifute, para decir que el jugador ya estaba camino de su casa y que el bufete de abogados que le defiende, Baker&Mckenzie, emitirá un comunicado en breve sobre la declaración del portugués: «El jugador ha declarado, está todo en orden. Está camino de su casa. Y tendréis una nota de prensa con toda la información», dijo Torres.
«Se ha mostrado relajado»
En su comparecencia ante la jueza de instrucción Mónica Gómez Ferrer, el futbolista solo tenía previsto contestar a las preguntas de su abogado y no las de la Fiscalía ni la Abogacía del Estado. Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) han señalado que el jugador no ha precisado traductor y que se ha mostrado «muy relajado» durante su declaración, que ha durado cerca de hora y media –empezó a las 11.30 horas y ha finalizado pasadas las 13 horas-.