La imagen de los jugadores de Chapecoense posando en el avión que les traslada a Venezuela se puede considerar un paso más hacia la normalidad de un club devastado por la tragedia. Ha costado -y seguirá costando- olvidarse del accidente aéreo que costó la vida a 71 personas hace solo tres meses, cuando se dirigían a Colombia a la disputa de la final de la Copa Sudamericana. Hoy, en pleno proceso de superación de aquello, la imagen de la nueva plantilla fotografiándose en un avión es reflejo de que la vida sigue y de que el mayor homenaje hacia las víctimas es hacer aquello con lo que ellos disfrutaban.
En un largo viaje de 27 horas que llevará a los jugadores hasta tierras venezolanas, el punto de partida desde Chapecó hasta Sao Paulo permitió que se produjese una imagen que tres meses antes, con motivo del accidente, dio la vuelta al mundo, la de los jugadores del equipo posando dentro del avión. El martes debutan en Libertadores ante Zulia en Maracaibo. El sueño de aquellos que fallecieron de manera trágica en busca de esto mismo.