En 2018 acaba el contrato de Andrés Iniesta con el Barcelona, como el de Lionel Messi, y al igual que el argentino, el Barcelona está por la labor de sentarse a renovar cuanto antes mejor. Todos saben el compromiso del manchego con el club, el único en el que ha jugado, aunque el centrocampista sabe cómo y cuándo mover sus cartas. Eso es conocido por la junta directiva de Josep María Bartomeu, que es consciente de la dificultad que tendrán para ampliar el contrato a Iniesta, de 32 años.
Hasta el momento no hubo contactos formales para comenzar a dialogar un nuevo contrato. Las posturas son buenas, pero ni el futbolista sabe lo que le ofrecerá el club ni Bartomeu conoce qué les pedirá el jugador. “Puede haber algo de controversia, pero Iniesta seguirá en el Barcelona”, dicen por los despachos del Camp Nou. Con todo, el jugador guarda silencio. Meses atrás dijo que quería “acabar su carrera en el Barça”, algo que fue bien recibido en los despachos del Camp Nou, aunque eso sí, el jugador exigirá seguir siendo uno de los mejores pagados del equipo, algo que se ha merecido en el terreno de juego (a día de hoy está en el segundo escalafón salarial).
