El entrenador del Bayern Múnich, Carlo Ancelotti, dijo hoy que el problema que ha tenido su equipo, que lleva dos derrotas consecutivas, no está ni en el sistema táctico que utiliza ni en la forma física y aseguró que no se ha reducido su confianza en la plantilla y que espera una clara mejora.
«El entrenamiento está bien preparado, no se trata de un problema de forma física«, dijo Ancelotti en la conferencia de prensa previa al partido de mañana contra el Bayer Leverkusen.
«El sistema no está funcionando bien pero el problema no está en el sistema«, agregó Ancelotti, que juega habitualmente con un 4-3-3.
Según Ancelotti, lo que se requiere es un mejor comportamiento táctico en el campo, dándole menos espacios a los rivales.
«Tenemos que mejorar tácticamente, nos falta ser mas compactos. Le damos a los rivales demasiadas posibilidades», indicó.
Según Ancelotti, actualmente se requiere paciencia y trabajo hasta lograr que el sistema funcione de manera natural en el campo.
«Soy optimista, estoy confiado de que superaremos rápidamente esta fase» dijo.
Ancelotti se refirió también al regreso de Uli Hoeness, que deberá ser elegido hoy como presidente del club, y dijo que una manera de celebrar el hecho será jugando bien y ganando.
«Es una buena oportunidad para celebrar el regreso jugando bien y ganando. Se trata de un momento importante para el club y él es un hombre importante para la institución», señaló.
El italiano saca la mano dura para enderezar el rumbo del Bayern tras tres partidos consecutivos sin ganar. El entrenador italiano, reacio a convocar a sus jugadores en la previa de los partidos, sí recluirá esta vez a sus futbolistas en el hotel la víspera del partido de Bundesliga ante el Leverkusen (sábado 26, 18:30, Movistar+ dial 177), según informa Sport Bild.
Esta por ver si la medida es puntual o se hace costumbre, pues no es el primer partido en casa en el que Ancelotti concentra a los jugadores del Bayern.
En pretemporada, el técnico transalpino tuvo que afrontar críticas por su política de no reunir al equipo en el hotel la noche anterior a los partidos. «Los jugadores son muy profesionales. Es mejor si se quedan en casa con su familia y sus hijos que si se quedan en el hotel, donde no tienen nada que hacer toda la tarde. No quiero que jueguen tanto a la Play Station…», dijo entonces Ancelotti saliendo al paso de las críticas.
Sin embargo, ya rompió su costumbre hace tres semanas, justo antes del parón de selecciones, cuando decidió concentrar al equipo antes de recibir al Hoffenheim.
La concentración coincide con la celebración esta misma noche de la asamblea anual del Bayern, en la que se elegirá de nuevo como presidente a Uli Hoeness. No estaba prevista la presencia de ningún jugador del equipo al evento. Sin embargo, sí se había anunciado la asistencia de Ancelotti, que ahora queda en duda.
