Bayern Múnich 8, Barcelona 2. El Estádio da Luz de Lisboa había sido escenario de un partido de cuartos de final de la Liga de Campeones que decretaba un marcador inconcebible. Sin restarle ningún mérito al Bayern, un equipo alemán tenaz y despiadada pegada que acabaría levantando su sexta Copa de Europa, lo visto fue bochornoso para el todopoderoso Barcelona de Lionel Messi y Luis Suárez. El club catalán completaba su primera temporada sin títulos desde 2007-08.Lionel Messi del Barcelona gesticula durante el partido contra Alavés en un partido de la Liga española, el sábado 31 de octubre de 2020. (AP Foto/Alvaro Barrientos)
“Hemos tocado fondo”, resumió Gerard Piqué. El central azulgrana estaba equivocado.
Aún faltaba más. Otro cambio de técnico. Transacciones de jugadores motivadas más para cuadrar cuentas que por cuestiones deportivas. Y el acabose: el pedido de Messi de ser transferido y que fue rechazado por el presidente de una directiva que acabó dimitiendo para evitar ser echado en una consulta de los socios. Al acabar el año, nada ha cambiado. El equipo sigue extraviado en una dinámica de altibajos.