La séptima fecha del Campeonato Nacional de Aceleración 2017, se realizará el próximo domingo en el autódromo Guatemala, ubicado en el kilómetro 19,9 carretera a El Salvador, que será el marco perfecto para que el piloto Eduardo Boleres ratifique su condición de líder en la categoría Sport Compact Plus y siga luchando en “D” Modificada y Super Comp 16.
A pesar de haber conseguido más de 30 triunfos en los seis años que lleva compitiendo en el certamen guatemalteco de aceleración, a Boleres se le ha negado un título de campeón “básicamente por falta de continuidad, pero espero que este año sí se concrete”.
Y es que actualmente Eduardo marcha como líder de la división Sport Compact Plus con 36 puntos. Ha corrido todas las fechas del campeonato, y si continúa en este paso y con la continuidad de resultados podría convertirse en el nuevo monarca de la categoría.
“Espero que ahora sí se me haga. Tengo mucha ilusión por ganar el campeonato, pero vamos paso a paso. Los autos me han respondido muy bien, y espero que este domingo todo salga de la mejor manera”, comentó Boleres.
Para afrontar estos nuevos retos, el piloto posee tres autos: un GTI 2013, un Evo 2004 y un Dodge Neon 2004, mejor conocido como “el Piolín“, por su intenso color amarillo.
Precisamente en este auto es en el cual Boleres depositará toda su confianza para seguirlo desarrollando, y así competir de lleno el próximo año en la categoría “C” Modificada.
“El carro da para más, y quiero entrarle de lleno a esa división. Sé que hay autos muy veloces, pero creo que podría obtener buenos resultados la próxima temporada”, reconoció el corredor.
La pasión por los autos de Boleres nació ya hace varios años “cuando por iniciativa de los amigos corríamos en un improvisado cuarto de milla ubicado por el aeropuerto. Luego decidí correr formalmente por el apoyo de mi amigo Julio Urizar”, recordó.
Los mejores tiempos de Boleres en el cuarto de milla han sido 13.60 con el Evo, 15.50 con el GTI y 12.85 con “el Piolín”; mientras que en el octavo de milla ha cronometrado 8.51 con el Evo y 9.82 con el GTI.
“Agradezco al apoyo de mi familia, que siempre están conmigo en todo momento. Sé que hay sacrificio en todo esto, pero los autos me apasionan”, reconoció el corredor.