Con el objetivo primordial de conquistar el bicampeonato en la Copa Mini, el piloto más joven en ganar un título en la historia del automovilismo nacional, Juan Diego Hernández, buscará a partir del próximo domingo dar el primer paso hacia adelante en la búsqueda del cetro 2015 en la categoría monomarca.
Con tan solo 18 años de edad, Juan Diego ya saboreó las mieles de la victoria, ya que el año recién pasado ganó el campeonato en la Copa Mini, y rompió así la hegemonía de experimentados pilotos como Adolfo “el Pato” Castillo, quien tiene en su historial haber ganado todas las copas monomarcas que se han disputado en el autódromo Pedro Cofiño.
“Me siento feliz por haber ganado el año pasado el título. Este año buscaré nuevamente la victoria en la categoría, pero no me siento presionado. Sé que tengo que salir a la pista a competir y mantener la concentración para lograr los resultados esperados”, comentó Hernández.
La juventud del corredor contrasta con la experiencia que tiene al volante, ya que desde que era un niño brilló en el kartismo nacional, luego dio el paso a la Copa Mini en la división de Novatos, en la cual se impuso en el 2013, y después dio el salto a la categoría de Expertos, donde se coronó el año recién pasado.
“Lograr este resultado requiere de mucho esfuerzo. En mi caso debo prepararme física y sicológicamente para cada carrera, pero además no debo de descuidar los estudios universitarios”, agregó Juan Diego.
Para el nuevo corredor del equipo Cepsa, empresa española líder a nivel mundial en lubricantes, defender de una empresa tan importante como esta requiere mucho compromiso.
“Agradezco la confianza que Cepsa depositó en mí, al igual que mis otros patrocinadores. Trabajaré arduamente para llegar a las metas que me he trazado y así llenar las expectativas de las personas que me apoyan”, dijo el corredor.
Juan Diego no olvida todas las anécdotas que le sucedieron la temporada recién pasada, ya que a su criterio “hubo mucha polémica cuando se conoció que gané el campeonato. Nadie se lo esperaba, ya que habían corredores de mucha experiencia que siempre habían conquistado las categorías monomarcas; sin embargo, al final todo se aclaró, los personas encargadas investigaron a fondo y oficialmente me otorgaron el título. Son experiencias que a uno le sirven para crecer y solo queda aprender para el futuro”.
Para Juan Diego este año será realmente especial, ya que además de la Copa Mini correrá la división Súper Street al mando de un Honda Civic, el cual compartirá con su papá, el varias veces campeón nacional y centroamericano Carlos Hernández.
“Para mi será un año especial. Es como un sueño cumplido correr con mi papá, él es mi ídolo y compartir con él será lo máximo. Estoy seguro que nos irá muy bien”, agregó Juan Diego.
Y es que la pasión por los autos el joven piloto la heredó de su padre, ya que a mediados de los años dos mil, Carlos Hernández, al mando de un Corvette C5 protagonizó grandes batallas en Guatemala y Costa Rica contra pilotos como los nacionales Carlos Zaid y Pedro Cofiño, costarricenses como Carlos Rodríguez y Javier Quirós, panameños como Óscar Terán o José Chocrón, o el salvadoreño Arnoldo Rivera, siendo Hernández el gran ganador en los duelos del área.