Luis Enrique, afónico, atendió a los medios una vez finalizada la celebración del equipo en el terreno de juego.
“El despliegue del equipo fue espectacular. Tomamos riesgos. Hubo un final de esos especiales y nos tocó a disfrutarlo a nosotros».
«En cuanto emoción son de esas machadas que viene a todos los estamentos del club, más después de la ida. Sucedieron muchas cosas. La clave fue la fe del equipo, cuando en el 84 estábamos eliminados».
«Tiramos de todo, hasta subió el portero a rematar. Luego, el sexto gol lo marcaron todos los culés del mundo. Esta es una competición que no perdona un mal partido».
«Dimos la vuelta y en cuartos esperamos rival. Tenemos que aprender de los errores. Mereció la pena el sufrir, incluso después de la derrota de París”.
